“Lo mejor sería ir a por el destornillador” y tenía razón, aquel enjambre de maderas disparejas no tenían más remedio que un destornillador que las organizara. Yo ya le propuse comprarla hecha, pero no hubo manera de convencerlo, incapaz de atender razones cuando de dinero se trata. Bajé con reparo a por la caja de herramientas y al entrar al sótano un hedor insoportable me produjo arcadas. Con los dedos tapándome las fosas nasales busqué entre la marabunta de trastos un destornillador plano, y en cuanto lo tuve salí corriendo escaleras arriba hasta la puerta del salón; “Cariño, tendrás que darte prisa, tu madre empieza a oler mal”
10 comentarios:
Brutal, bárbaro, humor negrísimo,...me faltan adjetivos, pero me encanta.
José María
joooooo pensaba que se trataba de un armario, pero dios mio de un ataud... bueno al menos ahorrasteis, pero el olor en el sotano quedaria para un tiempo...besos
Bueno, bueno, al principio pensé que era algo inspirado por las obras de vuestra casa..... pero no conté con que se trataba de la maquiavélica Carmen la que escribía.
Si es que no tienes remedio...
Eres mas peligrosa que un mono con dos pistolas.jajaja, que bueno
jeje...parece ser que el maquiavelico sueco se marcha de españa, quizá pueda colarse al muerto en alguna de sus cajas...
No sé como lo haces, bueno sí, tienes un sentido más de los que tenemos el resto de los mortales.
Con lo caro que cuenta un entierro, no me extraña, actualmente, con la crisis, no podemos ni morirnos.
La muerte llega en mal momento,
en el momento actual
las cosas están muy mal,
y no se puede ni enterrar,
ni a los muertos velar.
Aunque, claro, el mal olor del sótano, podría ser un indicio de lo acontecido, buena historia, muy actual, esto de la crisis nos puede llevar a todo, cuándo no se puede, pues, no se puede.
Besos, DEMOFILA.
Chiquilla, qué manera de hacerte la sueca...jaja...Está bien ese humor negro para desdramatizar la Crisis, la Pandemia y demás brujas del laboratorio del miedo. Un beso grande.
jajajajaja muy bueno, me he reido un montón. Cuantas situaciones parecidas acabamos viviendo en nuestra vida.
Un saludo.
bueno a lo mejor sólo se le había saltado algún tornillo a la pobre mujer, y por eso andaban detrás del destornillador, ¿no?... ... No, ya veo que no... jejeje
Carmen, muy bueno, ácido y con el sello de tus trucos mágicos al final, sorprendiendo como siempre
Deivid
Publicar un comentario