martes, 31 de agosto de 2010

VOLVER

A menos de dos horas del primer día de Septiembre, me siento como si fuese el día 31 del último mes del año, pero sin uvas. Precisamente hoy ya me he sorprendido diciéndome, "mañana empiezo el régimen, mañana voy a correr, mañana desempolvo la bicicleta, mañana me pongo las pilas en el trabajo, mañana vuelvo a escribir, mañana ordeno el armario (y además nunca jamás dejo que se vuelva a desordenar), mañana dejo la ropa preparada por la noche, bla bla bla, y así, sin querer, se me han resbalado cien propósitos, los mismos cien propósitos de siempre perfectamente alineados y renovados dos veces al año. Como ya conozco el paradero último de mis anodinas pero siempre inalcanzables aspiraciones, publico mi compromiso de volver a este blog, y solo así, sintiéndome en deuda, me veo capaz de liberar al "propósito de escribir" del sempiterno "propósito".




Esperad que no encuentro las llaves...ya está, ale, entrad, estáis en vuestra casa.